8 de julio de 2010

EL FLAMENCO: UN BAILE PARA TODOS


Los bailes son expresiones de sentimientos y emociones a través de gestos finos, armoniosos y coordinados. Muchos de estos requieren de condiciones físicas específicas (peso, altura, flexibilidad, fuerza y resistencia); sin embargo, el flamenco es un baile en el que estas condiciones no son determinantes a la hora de practicarlo.


Existen varias versiones sobre los orígenes de esta danza española. Una de ellas es sobre su descendencia arábica, otra clama que viene de los judíos que habitaron la península ibérica en 1942, y otras lo relacionan con las aves que llevan el mismo nombre, por su actitud garbosa similar a la de un bailaor.

Por otro lado, estudiosos plantean que nace en Andalucía a finales del siglo XVIII en el seno de una comunidad marginal, intercultural, hostigada, en la que convivían judíos, árabes, cristianos y gitanos, a la que se sumaron los ritmos de la población negra, que hacía escala en el puerto de Cádiz antes de partir a las plantaciones americanas.

Sin importar de dónde y cómo haya nacido, lo relevante es que este arte vivo se ha influenciado de todo tipo de tendencias sin perder su personalidad. Tiene la particularidad de que quien lo baila logra que el público que participa se conecte emocional y sentimentalmente.

Una pasión desde niña

Leslie Ricardo es una joven maestra de esta danza española. Según cuenta, con solo trece años y sin saber nada acerca del flamenco, pero con la ilusión y deseos de bailar como los bailaores de un espectáculo al que asistió, comenzó a practicarlo. Trece años después sigue bailando.

Para aprender a bailar flamenco sólo se necesita deseo, mucha práctica y constancia. Más que un baile de exigencias es una danza saludable en la que se mueven todas las articulaciones del cuerpo. Es un ejercicio físico suave.

Además trabaja la parte artística, creativa, la expresión corporal y la interpretación de la historia contada a través de la canción que se baila.

El flamenco se baila solo o acompañado por varias personas, sin distinción de género, por lo que es una forma de divertirse por su propia cuenta o con los demás.

Según Ricardo, la edad tampoco es vital a la hora de practicarlo. Usted puede iniciar cuando desee, pues le ayudará a mejorar la coordinación, la orientación, fomenta el equilibrio, lo que ayuda a estabilizar el cuerpo y la mente.

TÉCNICA, BELLEZA Y SABOR

“El flamenco es expresión, es libertad, enojo, pasión, fuerza. El flamenco es parte de mí. Eso es lo que quiero transmitir y enseñar, quiero que la gente conozca más de este arte. Quiero que como se interesan por el Ballet Clásico, el Hip Hop o el Jazz, también se interesen por el flamenco, que conozcan la magia que lo envuelve, no importa la edad”, expresa Ricardo.

Accesorios para el baile

Para dar más majestuosidad a esta danza las bailaoras utilizan diferentes accesorios o complementos, tales como:

Castañuelas: en el flamenco es el instrumento que se utiliza para dar color y un carácter más fuerte y poderoso al baile.

Mantón: en este baile representa la pura moda española, la elegancia, y permite realizar movimientos más avanzados. Aporta gran vistosidad tanto al baile como al movimiento de la bailaora, tiene una técnica propia y complicada. El objetivo de la bailaora es mover el mantón al compás y hacer que su movimiento parezca una parte del cuerpo.

Abanico: el flamenco es pasional y coqueto. En este baile el abanico sirve para transmitir sentimientos y pasiones ocultas. Las formas, las posturas y miradas junto a éste han dado lugar a un lenguaje singular y único de insinuación y feminidad.

Sombrero: forma parte destacada de la indumentaria tradicional andaluza, siendo un elemento distintivo.


ListinDiario.com

No hay comentarios: