Satisface que Esteban Rosario haya dicho que la amenaza de muerte que pende en su contra por sicarios pagados con millones de pesos no detendrá sus denuncias contra los males que hay afectan a la nación.¿Quién puede ordenar asesinar a Esteban Rosario? Esa repuesta hay que buscarla en los que se perjudican con su batallar contra la corrupción.
Históricamente Esteban Rosario, autor de varios libros, se ha caracterizado por denunciar la mala conducta de sectores muy poderosos por demás intolerantes.
Sabemos el desprecio que hay por la vida en este país. Aquí se mata a cualquiera por “cualquier quítame esa paja” y las investigaciones nunca dan con los culpables.
Recientemente en Santiago, ciudad donde reside Esteban, se intentó asesinar a Jordy Veras, hijo del reconocido abogado Manuel Antonio Veras y aún no se ha dado con los culpables materiales e intelectuales de ese hecho. El propio Rosario vio caer al camarógrafo de su programa “Detrás de la noticia” y hoy su hija, de profesión abogada, también es amenazada.
El último aporte de Esteban Rosario a la lucha contra la corrupción es un libro: “La corrupción en los ayuntamientos de Santiago”, texto bien documentado sobre lo que entiende es la corrupción en los cabildos de la Provincia de Santiago en los ultimos años, que todo interesado en la claridad de la administración de los fondos públicos debe leer.
Las alcaldías de Santiago de los Caballeros, La Canela, Licey al Medio, Sabana Iglesia, Las Palomas y Pedro García fueron usadas como si fueran fincas de sus alcaldes, que erogaron millones de pesos para cualquier cosa sin ninguna justificación contable, ordenaron la construcción de obras a amas de casas, practicaron de nepotismo, los testaferros bailan en todas las fiestas y miles de diabluras más.
Todo eso y mucho más es el común denominador en las instituciones del Estado, pues no hay respeto por los recursos públicos. Nuestros hombres públicos acuden a las instituciones a servirse con la cuchara grande.
Las autoridades deben preservar la vida de Esteban. Hay que darle protección para ejercer su oficio de periodista, desde el cual hace un buen aporte al país. Creo que lo único que hay que hacer es clonarlo
Tomado del Diario Libre.
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