Margarita Marmolejos Cervantes, de 92 años de edad, descendiente directa del autor El Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes Saavedra, reside en la carretera de Mendoza, Santo Domingo Este.
Margarita, con quien no fue posible tener una comunicación fluida, porque padece serios problemas de audición, es hija de la española Juana Cervantes Alcolea y el dominicano José Marmolejos.
Juana Francisca Cervantes Alcolea llegó al territorio dominicano en 1901 procedente de Cuba, acompañada de su padre Diego Cervantes, su madre y sus hermanos.
La familia llegó huyendo de las consecuencias de la guerra por la independencia de Cuba y se radicó en Puerto Plata.
Cuando terminó la guerra, Diego y su familia volvieron a Cuba, pero Juana se quedó en el país porque estaba casada.
Juana se radicó en Puerto Plata y tuvo 9 hijos, de los cuales sólo 4 están vivos. Murió en 1981 a los 107 años de edad.
Sin embargo, hay una amplia descendencia de la famila Cervantes en la República Dominicana, conformada por los hijos, los nietos y biznietos de Juana.
Margarita vive con su hijo Juan Marmolejos en la Carretera de Mendoza , mientras que otros descendientes radican en Puerto Plata y Santiago.
A partir de la publicación de un reportaje en El Nacional sobre la existencia de descendientes directos de Miguel de Cervantes en el país, nació esa familia un inmenso interés por conocer sus familiares en Cuba , España o cualquier otro lugar.
“Hasta esa publicación no nos habíamos interesado por el tema, pero la gente nos llama y nos dice que debemos tratar de comunicarnos con nuestros familiares“, afirma Juan Marmolejos.
No se habían interesado, a pesar de que reciben constantes informaciones sobre la herencia que su bisabuelo Diego Cervantes dejó a su abuela Juana en España.
Manifestó que en una oportunidad, hace varios años, un español de apellido Cervantes trató de localizar a la familia en la República Dominicana y hasta se habló de un encuentro familiar, pero nunca se concretó.
Expresa que su abuela Juana Cervantes perdió la comunicación con su familia, porque siempre se negó a recibir sus cartas, por temor a la represalia de la tiranía de Rafael Leonidas Trujillo.
“Los Trujilllo siempre preguntaban qué familia Cervantes era esa a la que le llegaban tantas cartas” , asegura Juan, entrevistado en su residencia junto a su anciana madre.
“Pero mis abuelos recibían información de que era peligroso recibir esas cartas y nunca se interesaron en recibirlas”, siguió.
Mañana la familia se reunirá para examinar algunos datos que han reunido sobre la ubicación de los Cervantes en el extranjero.
En un primer momento, la investigación se iniciaría en Cuba y España, por lo que agradecerían la ayuda de las embajadas de ambas naciones en la República Dominicana.
En el país empezaron a recabar la documentación que podría ayudar en esa búsqueda, como la cédula de Juana Cervantes.
También, se interesaron en el tema algunos hijos de Margarita Marmolejos Cervantes que residen en Estados Unidos.
“Esa publicación de El Nacional ha provocado un revuelo en la familia que nos ayudará en éstabúsqueda”, precisa Juan
La reunión de mañana estará encabezada por Leonel Marmolejos Cid, un primo de Juan que siempre se ha interesador ubicar a los Cervantes en el extranjero.
La descencia directa con Miguel de Cervantes siempre fue tema de conversación entre la familia de Juan Cervantes.
“Tenían un parentesco muy cercano, pero la gente no le gaba mucha importancia.
Juan atribuye a ese parentesco el martor de su abuela Juana Cervantes por la lectura.
“Pero en el país ninguno de los Cervantes se ha dedicado a la literatura”, manifestó.
Juana Cervantes era muy querida en Puerto Plata, porque hacía muchas obras de bien, amparada en los conocimientos que tenía sobre medicina.
Además, era una excelente costurera, muy demandada en aquella época.
La familia Cervantes se radicó en Puerto Plata en el 1901. La descendencia en la República Dominicana ha crecido, pero no tiene ninguna información sobre los familiares de la abuela Juan Cervantes, la mayoría de los cuales deben residir en España y Cuba.
Un Apunte
La familia esta interesada en iniciar una búsqueda constante hasta dar con el paradero de sus familias.
Los documentos que les permitan encontrarlos son pocos, pero tienen la esperanza de que pronto reunirán la información que le permita lograr ese objetivo.
Margarita, con quien no fue posible tener una comunicación fluida, porque padece serios problemas de audición, es hija de la española Juana Cervantes Alcolea y el dominicano José Marmolejos.
Juana Francisca Cervantes Alcolea llegó al territorio dominicano en 1901 procedente de Cuba, acompañada de su padre Diego Cervantes, su madre y sus hermanos.
La familia llegó huyendo de las consecuencias de la guerra por la independencia de Cuba y se radicó en Puerto Plata.
Cuando terminó la guerra, Diego y su familia volvieron a Cuba, pero Juana se quedó en el país porque estaba casada.
Juana se radicó en Puerto Plata y tuvo 9 hijos, de los cuales sólo 4 están vivos. Murió en 1981 a los 107 años de edad.
Sin embargo, hay una amplia descendencia de la famila Cervantes en la República Dominicana, conformada por los hijos, los nietos y biznietos de Juana.
Margarita vive con su hijo Juan Marmolejos en la Carretera de Mendoza , mientras que otros descendientes radican en Puerto Plata y Santiago.
A partir de la publicación de un reportaje en El Nacional sobre la existencia de descendientes directos de Miguel de Cervantes en el país, nació esa familia un inmenso interés por conocer sus familiares en Cuba , España o cualquier otro lugar.
“Hasta esa publicación no nos habíamos interesado por el tema, pero la gente nos llama y nos dice que debemos tratar de comunicarnos con nuestros familiares“, afirma Juan Marmolejos.
No se habían interesado, a pesar de que reciben constantes informaciones sobre la herencia que su bisabuelo Diego Cervantes dejó a su abuela Juana en España.
Manifestó que en una oportunidad, hace varios años, un español de apellido Cervantes trató de localizar a la familia en la República Dominicana y hasta se habló de un encuentro familiar, pero nunca se concretó.
Expresa que su abuela Juana Cervantes perdió la comunicación con su familia, porque siempre se negó a recibir sus cartas, por temor a la represalia de la tiranía de Rafael Leonidas Trujillo.
“Los Trujilllo siempre preguntaban qué familia Cervantes era esa a la que le llegaban tantas cartas” , asegura Juan, entrevistado en su residencia junto a su anciana madre.
“Pero mis abuelos recibían información de que era peligroso recibir esas cartas y nunca se interesaron en recibirlas”, siguió.
Mañana la familia se reunirá para examinar algunos datos que han reunido sobre la ubicación de los Cervantes en el extranjero.
En un primer momento, la investigación se iniciaría en Cuba y España, por lo que agradecerían la ayuda de las embajadas de ambas naciones en la República Dominicana.
En el país empezaron a recabar la documentación que podría ayudar en esa búsqueda, como la cédula de Juana Cervantes.
También, se interesaron en el tema algunos hijos de Margarita Marmolejos Cervantes que residen en Estados Unidos.
“Esa publicación de El Nacional ha provocado un revuelo en la familia que nos ayudará en éstabúsqueda”, precisa Juan
La reunión de mañana estará encabezada por Leonel Marmolejos Cid, un primo de Juan que siempre se ha interesador ubicar a los Cervantes en el extranjero.
La descencia directa con Miguel de Cervantes siempre fue tema de conversación entre la familia de Juan Cervantes.
“Tenían un parentesco muy cercano, pero la gente no le gaba mucha importancia.
Juan atribuye a ese parentesco el martor de su abuela Juana Cervantes por la lectura.
“Pero en el país ninguno de los Cervantes se ha dedicado a la literatura”, manifestó.
Juana Cervantes era muy querida en Puerto Plata, porque hacía muchas obras de bien, amparada en los conocimientos que tenía sobre medicina.
Además, era una excelente costurera, muy demandada en aquella época.
La familia Cervantes se radicó en Puerto Plata en el 1901. La descendencia en la República Dominicana ha crecido, pero no tiene ninguna información sobre los familiares de la abuela Juan Cervantes, la mayoría de los cuales deben residir en España y Cuba.
Un Apunte
La familia esta interesada en iniciar una búsqueda constante hasta dar con el paradero de sus familias.
Los documentos que les permitan encontrarlos son pocos, pero tienen la esperanza de que pronto reunirán la información que le permita lograr ese objetivo.
FUENTE EL NACIONAL
No hay comentarios:
Publicar un comentario