Joel Fabián demostró que en un estadio se puede hacer algo más que jugar béisbol. Mientras Tigres y Gigantes competían en el terreno, el joven hizo el lanzamiento para convencer a su pareja de dar el paso grande.El pasado martes, Fabián le pidió matrimonio a su novia Marcel Uribe en el partido que Licey derrotó 7-6 a los Potros del Cibao. El estadio Quisqueya vibró colectivamente de la emoción cuando en el séptimo episodio la pantalla del jardín central presentaba a Fabián postrado ante su amada con la sortija de compromiso en un cofre color carmesí, detalle que se ajusta a la perfección por pertenecer a la simbología del amor.
“Me inspiré a hacer esto porque me gusta el béisbol y quería hacer algo que impactara”, dijo Joel Fabián a Multimedios del Caribe momentos después de completar el paso final de su conquista. La pareja se conoció por Internet y lleva cinco años y medio de noviazgo y esperan consumar el matrimonio el próximo 17 de diciembre.
“No lo esperaba. Fue una sorpresa, me quedé en shock. La verdad no me esperaba que él hiciera algo así entre tanta gente”, resalto Marcel Uribe, quien además afirmó que se le enfrió el corazón y las piernas comenzaron a temblarle en el momento que su novio le pedía matrimonio.
Esta no es la primera vez en el país que uno de los estadios de béisbol profesional es utilizado para expresar o demostrar amor.
En enero de 1964, y luego de concluido el encuentro ganado por el Licey al Escogido 6-4, el lanzador de los Tigres Bienvenido- Kaki- de la Cruz, contrajo nupcias en pleno Quisqueya con Marianela Pichardo.
La boda se efectuó en las oficinas del equipo azul y asistieron los compañeros del novio.
El amor se deja sentir
En los últimos años, las peticiones de matrimonio han estado a la orden del día en el Quisqueya.
Jóvenes han aprovechado un parque con miles de personas para lograr su propósito del compromiso matrimonial. Una pareja, la de Annelys y Ricardo, decidió hacer su sesión de fotos de la boda en el vetusto parque de la capital
EL CARIBE
No hay comentarios:
Publicar un comentario